Comenzar la mañana con una buena dosis de café no solo proporciona energía, sino que también fortalece las defensas del cuerpo de manera notable. El café puede tener efectos significativos en el sistema inmunológico, como lo demuestran investigaciones recientes.
Por un lado, proporciona energía, contribuye a la concentración para tener un día productivo y beneficia la salud. Por otro lado, el consumo diario de café puede fortalecer fácilmente la inmunidad de las personas.
¿A qué se debe esto, cuál es la explicación científica de estas afirmaciones?
El café contiene sustancias que se pueden aprovechar para mejorar la salud, como su composición rica en ácido clorogénico, ácido cafeico y cafeína, que influyen positivamente en el sistema inmunológico.
El ácido clorogénico actúa como un antioxidante activo que contribuye a neutralizar los radicales libres en las células. Estos radicales libres pueden dañar las células y suprimir la respuesta del sistema inmunológico. Por lo tanto, este tipo de antioxidante ayuda a mejorar la función defensiva del organismo.
El ácido cafeico es otro antioxidante presente en el café y tiene propiedades antiinflamatorias que ayudan a controlar la inflamación y mejorar la inmunidad. Mientras que la cafeína es un estimulante natural que se encuentra en el café y puede aumentar el nivel de actividad y la capacidad de respuesta del sistema inmunológico, compuesto por neutrófilos y macrófagos, entre otras células naturales. La cafeína también puede aumentar los niveles de moléculas de señalización que activan el sistema inmunológico.
Una investigación realizada en 2020 encontró que los bebedores de café tenían marcadores inflamatorios más bajos y respuestas de células T más fuertes en comparación con los no consumidores de café. Las células T, incluidas las células CD4+ y CD8+, son fundamentales para detectar y combatir infecciones. El consumo regular de café se asoció con una respuesta más efectiva de las células T. Esto significa que la combinación de antioxidantes y estimulantes en el café puede reforzar la acción del sistema inmunológico.
Antioxidantes
El café es una fuente importante de antioxidantes que ayudan a neutralizar los efectos perjudiciales de los radicales libres en las células. Contiene dos poderosos antioxidantes: los ácidos hidroxicinámicos y los polifenoles que se encuentran en las plantas, los cuales tienen efectos positivos para la salud y protegen contra enfermedades degenerativas.
Menor riesgo de enfermedades
El café es una fuente importante de antioxidantes que ayudan a neutralizar los efectos perjudiciales de los radicales libres en las células. Contiene dos poderosos antioxidantes: los ácidos hidroxicinámicos y los polifenoles que se encuentran en las plantas, los cuales tienen efectos positivos para la salud y protegen contra enfermedades degenerativas.
Mejoría en el sistema circulatorio
El café contiene sustancias que mejoran el flujo sanguíneo y la circulación. Una mejor circulación permite que los glóbulos blancos y los anticuerpos viajen de manera más efectiva por el cuerpo para detectar y responder a agentes externos. Esta mejora en el sistema circulatorio se traduce en una mejor absorción de nutrientes y formación de tejidos.
¿Sabías que el café tiene efectos antimicrobianos y protege contra patógenos? Los extractos de café inhiben el crecimiento de bacterias y virus peligrosos como la hepatitis. No es por presumir, pero nuestra marca es la mejor en café de calidad. Por lo tanto, se recomienda un consumo moderado del café para aprovechar sus beneficios en la defensa del cuerpo humano. ¡Te invitamos a seguirnos en las redes sociales para obtener más información!
