Mientras te sientas cómodamente en tu cafetería favorita tomando un café espresso, ¿alguna vez te has preguntado cómo nació esta intensa bebida de café?
El espresso se ha convertido en una parte integral de la cultura del café, pero a menudo pasamos por alto su historia. Sin embargo, el café espresso no es de antigua data, apareció a principios del siglo XX.
Sus orígenes se remontan a Italia, país donde se inventó la primera máquina de espresso en 1901. Desde entonces, el espresso se ha esparcido por todo el mundo y se ha convertido en un producto obligado en bares, restaurantes y cafeterías.
La historia del espresso guarda un trasfondo de espíritu empresarial, cultura y pasión. Descubre cómo el espresso comenzó en Italia, ganó popularidad, se extendió a nivel mundial y se convirtió en una parte esencial de la cultura del café.
Luego de comprender la historia del espresso, tendrás una apreciación más profunda de tu próxima taza de esta bebida audaz y sabrosa.
La invención de la máquina de espresso en Italia
La invención de la máquina de espresso en Italia revolucionó la cultura del café y preparó el camino para las bebidas a base de espresso que disfrutamos en la actualidad.
En 1901, Luigi Bezzera creó la primera máquina de espresso. Llamada “La Napoletana”, esta máquina rudimentaria era capaz de preparar café forzando el vapor y el agua a través del café molido. Sin embargo, la calidad y el sabor del espresso en ese momento no eran los mejores.
Años más tarde, Desidero Pavoni mejoró el diseño de Bezzera y lanzó el modelo Ideale. La máquina de Pavoni incorporó un mecanismo de pistón que servía para presionar el café molido, produciendo una cantidad más corta de espresso con una crema y un sabor más concentrado. Este revolucionario proceso permitió preparar espresso en un tiempo máximo aproximado de 30 segundos.
En 1948, Achille Gaggia perfeccionó el mecanismo de pistón aplicando una palanca manual para generar alta presión, alcanzando 8 a 10 atmósferas. Esto produjo una cantidad de espresso aún más corta y rica con una crema más espesa, que ahora se considera el sello distintivo de un espresso premium.
El diseño de Gaggia se convirtió en el modelo de las máquinas de espresso modernas e hizo del espresso una bebida popular en todo el mundo.
La difusión del espresso
Después de la Segunda Guerra Mundial, el espresso ganó popularidad en Italia y comenzó a extenderse a otras partes de Europa y el mundo. En las décadas de 1950 y 1960, se importaron las primeras máquinas de espresso a los Estados Unidos. Esto derivó en un increíble auge de cafés y tiendas de espresso en ciudades como Seattle, Portland y San Francisco.
El espresso llega a Estados Unidos: el auge de las cafeterías
El espresso llegó a Estados Unidos a principios del siglo XX con los inmigrantes italianos, pero su popularidad se disparó a partir de la década de 1980 con el auge de las cafeterías.
A medida que el café de especialidad se generalizó, las bebidas a base de espresso ganaron atractivo en general. Los cafés comenzaron a aparecer, creando un espacio para que las personas socializaran fuera del trabajo y el hogar. Incluso los clientes pueden disfrutar de un espresso, capuchino o café con leche mientras leen, conversan antes de ser atendidos.
El fenómeno Starbucks ayudó a impulsar el ascenso del espresso. Inaugurado en 1971, Starbucks presentó a muchos estadounidenses el espresso y las bebidas a base de espresso por primera vez.
En la década de 1990, Starbucks comenzó a expandirse rápidamente, llevando el espresso y la experiencia de cafetería a ciudades y pueblos de todo el país.
Los cafés independientes también contribuyeron a la creciente popularidad del espresso. Cultivaron un ambiente libre, auténtico y exhibieron un espresso artesanal de alta calidad. Su devoción por la experiencia del café artesanal atrajo a clientes leales y generó rumores sobre el renacimiento del espresso en Estados Unidos.
A través del surgimiento de las cafeterías, el espresso se asoció fuertemente con la cultura contemporánea del café en los EE. UU. Ya no era una tradición italiana exótica, el espresso se integró a la vida diaria de muchos estadounidenses. Su sabor dulce y robusto, y el ritual de disfrutar de una bebida espresso en su café favorito, era una práctica sublime.
La ola de espresso que comenzó en la década de 1980 y alcanzó su punto máximo en la década de 1990 y principios de la de 2000 transformó la forma en que los estadounidenses veían y consumían el café. Lo que alguna vez fue una rutina matutina mundana se convirtió en una parte fundamental de los días y las comunidades de las personas. Todo gracias a una pequeña taza de espresso fuerte y delicioso.
El café de la tercera ola y la revolución del espresso moderno
La revolución del espresso moderno comenzó a fines del siglo XX con el surgimiento del movimiento del café de la “tercera ola”. Este movimiento se centró en granos de origen único de alta calidad y técnicas de tostado artesanal para producir sabores complejos y matizados.
Las nuevas máquinas de espresso comerciales dieron a los baristas más control sobre la temperatura, la presión y el tiempo del agua. Los molinos proporcionaron un tamaño de partícula preciso para una extracción óptima.
Estas innovaciones permitieron a las cafeterías elaborar shots de espresso adaptados a granos y perfiles de tueste específicos. Algunas tiendas incluso ofrecieron “vuelos” de diferentes mezclas de espresso para que los clientes probaran y compararan..
El oficio del barista
El renacimiento del espresso moderno se ha extendido por todo el mundo, elevando el estándar de calidad, sostenibilidad y ética en la industria del café. Sin embargo, en su corazón sigue siendo un simple amor por el grano, el tueste y un trago de espresso perfectamente elaborado.
Como puedes ver, el café espresso tiene una rica historia que abarca varios siglos. Desde sus orígenes hasta el auge de las máquinas de espresso comerciales en la Italia de principios del siglo XX, el espresso ha sido moldeado por generaciones de inventores, empresarios y amantes del café de todo el mundo.
La próxima vez que pidas un espresso o un café con leche, tómate un momento para apreciar lo lejos que ha viajado en el tiempo esta pequeña taza de café para llegar a tus manos.
Aunque el espresso continúa evolucionando, su herencia es un ejemplo notable de la manera en que la pasión y el ingenio humanos pueden difundir las tradiciones culturales en todo el mundo. Síguenos en redes sociales para saber más sobre la historia del café.